Bomba de cereza

El suspense es salvaje.
Cuánto más pienso en ti
más me derrito como un helado.
Porque anhelo tu calor,
y nada me hará evitarlo.

Y la sensación no se detiene
porque estoy ardiendo,
a punto de estallar.
Una especie de excitación
que no puedo explicar...
Oh, allá voy otra vez...
Siento como viene...

Y es como un flash nocturno.
En mi interior ocurre algo,
estallo como una bomba de cereza.
Y pensar en ti
me produce una dulce sorpresa.
Ven a mí esta noche...
Soy pura dinamita...
Mi corazón es una dulce bomba de cereza.

Oh... estos pensamientos me matan.
Se posan en la punta de mi lengua
como un terrón de azúcar.
Voy a saco y no tengo suficiente,
porque hay algo en ti
que me tiene enamorada.

Y la sensación no se detiene
porque estoy ardiendo,
a punto de estallar.
Y estoy dando vueltas
con esta pasión que encontré.
Oh, allá voy otra vez...
Siento como viene...

Y es como un flash nocturno.
En mi interior ocurre algo,
estallo como una bomba de cereza.
Y pensar en ti
me produce una dulce sorpresa.
Ven a mí esta noche...
Soy pura dinamita...
Mi corazón es una dulce bomba de cereza.



(N.d.T.: -porque yo lo valgo- una Cherry Bomb no es una cereza vasca. Es un petardo popular (y prohibido) en Estados Unidos que tiene forma de cereza. Pero es bonito el concepto: una cereza... dulce... ácida... estallando en tu interior. Igual que una Cherry Bomb. Pero no te tragues una Cherry Bomb encendida, porque ni dulce ni ácido.)