Bright Lights

3 minutos 38 segundos de clase, de estilo, del mood adecuado para atravesar la ciudad en una noche de ligera lluvia como la de hoy en Barcelona.

Cee Lo es MUY grande. Es LUJO, que diría JLfromtheblock. Su "Language of love" era una de las mejores canciones de la banda sonora de Sexo en NY2 y es el compositor de LA canción de la primera parte de la película, "Dressed up in love"; además de ser la voz de aquel "Crazy" de Gnars'n'Barkley que hace años dio por saco a todas horas en todas las radios. Amén de varios hitazos R'n'B para mogollón de artistas.

Con su "Fuck You" encandiló a medio mundo, incluídos los modernos de Je Ne Sais Pop; y con este segundo single se encumbra como uno de los artistas más elegantes y con más carisma que ha parido esa gran nación que es EEUU (aunque a Julian Assange le joda).

Y es que sólo hay que mirarle para ver que, sea pose o no, Cee Lo sabe que el estilo o se tiene o no se tiene. Y eso precisamente, estilo, es lo que destila la canción por todos lados. Producción electrónica con base instrumental y un bajo que recuerda al "Billie Jean" de Michael Jackson, acompañado de una voz iconfundible y una letra perfecta para prepararte antes de salir a patear la noche.

Bright lights and the big city...

HDB18 - STILL ALIVE!!

Porque aún estamos vivos, señores.

El mejor house y el mejor dance, compilado en un 99% del magnífico blog Haus of Toxic by Chico Toxico.

Ideal para volverse loco bailando, para darlo todo antes de salir a quemar la ciudad o durante. O después.

También es indicado para solucionar conflictos internacionales.


Para sobrevivir enterrado bajo tierra...


O para solucionar nuestros problemas financieros...


Sea como fuere, descárgala ya y déjate de patochadas.

HDB18: STILL ALIVE!!

La sombra

Hay una sombra enorme (como de 600 kilómetros cuadrados) que lleva años cerniéndose sobre mí.

Mis amigos son conscientes de ello. Mi familia también. Hasta el punto de que ya dicen que huelo a ella y todo.

Es la sombra de un luegar que visité una vez y me enamoró (tanto por el sitio en sí como por la gente que conocí allí) y que cada vez que visito me gusta más y más. En cuanto bajo del tren o del avión me siento como en casa y recorrer sus calles, al contrario de lo que me pasa en otros lugares, me resulta de lo más natural del mundo.

Cuando hablo con la gente que ya tengo allí todos me dicen que a ver cuándo vuelvo a hacerles una visita. O los más atrevidos me preguntan cuándo me instalaré allí de una vez por todas.

Esa sombra me ha provocado muchas dudas. Dudas sobre mi estabilidad personal y laboral. Dudas sobre el cariño que le tengo al lugar en el que vivo. Dudas sobre lo que me estoy perdiendo por no estar allí.

Pero hace un tiempo ocurrieron dos cosas en mi vida que hicieron que esa sombra se disipara, como si alguien hubiera encendido un foco justo sobre mí provocando que la maldita sombra se concentrara justo bajo mis pies, donde no la veía.

Yo sabía que ella seguía ahí y que la seguiría revisitando tan a menudo como pudiera, pero ahora yo la controlaba a ella y las dudas sobre todas las cosas habían desaparecido.

Tenía claro dónde quería estar y qué quería estar haciendo.

Pero qué poco duró la fiesta, Pepe.

Hace unos días una persona (cuya llegada a mi vida fue, en parte, motivo por el que esa sombra se desvaneció) me planteó una cuestión; cuestión que ha hecho que esa maldita sombra comience a escaparse de mis pies y vuelva a planear sobre mí; como una de las naves de Independence Day, apoderándose de mí y escurriéndose por todos los rincones de mi pequeño mundo.

Si finalmente ocurre lo que no quiero que ocurra, la sombra volverá de nuevo a planear sobre mi cabeza y las dudas volverán a inundarlo todo. Y aunque había decidido que al menos en dos o tres años no iba a permitirlo, volveré a pasar por una de esas etapas mías en las que no sé si voy o vengo.

Lo peor de todo es que no sé si realmente quiero que la sombra vuelva o no; lo que sí sé es que ahora mismo espero que se quede donde está; porque aunque la vida es muy corta y hay que vivirla como quieres vivirla porque no vas a tener otra (o tal vez sí pero ¿acaso tú recuerdas alguna de tus vidas anteriores?) hay cosas que debes hacer con la cabeza bien amueblada, las posibilidades bien estudiadas y la cuenta corriente saneada y llena de ceros.

Así que te pido por favor Endesa de mi vida que no me falles ahora que no quiero volver a estar aburrido y pensando que estaría mejor en ese otro lugar. Porque quien sabe si, una vez allí la que me da por saco es la sombra de lo que dejé atrás.

Con lo tranquilo que yo estaba.

Qué desgracia, María.

Living a Sandenai

El jueves pasado la grandísima Soraya presentaba su último discazo, Dreamer, en la sala Sutton de Barcelona.

Para allá que fuimos Danny Oton, IlSignorino, el otro chico que era muy guapo y cuyo nombre no recuerdo y yo. Antes de entrar hubo un momento gabinete de crisis porque no sabíamos sin con las pintas que llevábamos nos iban a dejar entrar; que no es que fuéramos en plan rocieras con las faldas de topos y las chanclas pero a mí mis bambas no me las quita nadie que estuve todo el puto día de pie y los zapatos me matan.

En la puerta no nos pusieron mucha pega (aunque el segurata nos miró bastante raro y soltó algún comentario sobre la camiseta que llevaba IlSignorino bajo el jersey) y como estábamos en lista no pagamos una mierda. Como tiene que ser. Si vas a pagar al menos que sea porque les hace falta, como en Arena (que necesitan urgentemente una reforma) y no a unos pijos relamíos que tienen el local lleno de publicidad de Moët.

La Sutton, que yo no había ido nunca, es una discoteca bastante grande con unas zonas vips casi más grandes que la pista principal que al final de Vip no tienen nada porque acaban abarrotadísimas y llenas de guiris y oficinistas borrachos que parece que estén en la boda de su prima. Bueno, en realidad lo de la boda de tu prima es en la sala de fumadores. El horror hecho música. Se nota que es un local hetero porque aquello además de estar lleno de gente fea (toma heterofobia!) era el infierno hecho playlist: Duncan Dhul, Seguridad Social, Safri Duo y cosas de estas que sólo aguantas con una corbata en la cabeza y una barra libre bien surtida.

Hablando de barra. 12 euros el cubata de vodka con naranja, 6 euros la naranjada y 9 la Coca Cola. Eso sí, camareros estiradísimos (como todos en general).

Tras comprobar la fauna y flora del lugar nos colocamos prudentemente cerca del escenario (en primera fila, vamos) porque los fans que había pululando por el local estaban pasándoselo genial por otros lares y el resto (que o eran guiris o eran heteros de estos que no tienen ningún tipo de vergüenza pero provocan la ajena) no tenían ni idea de que actuaba Soraya.

Antes de la actuación estuvo pinchando el DJ Pectorales, que es de estos que saben elegir la música y que de vez en cuando hacen un efecto guay con su tabla de mezclas pero que al final abusan de la pose de DJ y acaban tocando los botones para simular que hacen algo cuando en realidad todo viene hecho ya por el mix que estás mezclando.

El telón del escenario se cierra y al poco rato se abre para dejar paso a Soraya, a las Titless Gogós y a Brian Cross (que resultó ser un tío con una camiseta con una mariposa gigante que llevaba toda la noche dando vueltas por ahí).

Y qué mejor carta de presentación que "You've got the music". Como nos pusimos justo al principio de la pasarela (yo siempre hago eso en los conciertos de las más grandes, ya lo hice con Madonna en el Sticky & Sweet) cada vez que la chica salía a cantar le veíamos la espalda.


Pero luego, entre canción y canción, Brian Cross se ponía a pinchar (y el chico iba a lo seguro, porque pinchó la mitad del One Love de David Guetta y hitazos que no fallan como el Sweet Dreams y tal) y Soraya se situaba junto a él a darlo todo con su copa de cava.
Bueno, sería Moët así que deberíamos llamarlo "CHAMPÁN". Pero a mí "champán" es una palabra que siempre me ha hecho gracia porque suena a final de refrán de abuela nonagenaria. "Van dos en moto y se cae el de enmedio por la ventanilla. Champán!".


Así que la presentación fue animadísima porque entre temazo y temazo el Sr. Cross se lanzaba y metía un tema de Soraya y la cosa no sólo funcionaba de puta madre sino que le daba un empaque perfecto al disco (porque no hay mejor forma de presentar temas nuevos que mostrar con qué pega a la perfección). Y claro, el segundo tema no podía ser otro que "Dreamer" y ya sabéis cómo empieza Dreamer.
Para cuando quisimos darnos cuenta ya teníamos a Soraya a nuestro lado y pudimos gritar como locas aquello de:

#SANDENAI!!!

Y creo que le dimos un susto.

Ella lo dio todo en el escenario, el público reaccionó la mar de bien y nosotros disfrutábamos como niñatas en un concierto de TakeThat. SORAYA TE QUIEROOOOOOOO

Los que sí estaban como fans de Take That eran los fans que se acercaban al escenario tras cada actuación y le lanzaban besos y le pedían que se acercara a hacerse una foto y la amenazaban con un "O VIENES TÚ O VOY YO ¿EH?!" Ella, que es toda una diva y además es simpatiquísima, se acercó a hacerse fotos con todo el que quiso.
He de reconocer que estuve tentado de llamarla y decirle "tía, que soy Hidroboy!!! El amigo de Tony Tornado!! Y del Stalker Australiano!! ¡¡EL DEL SANDENAI!!" pero también es cierto que a mí en actos así me da mucho apuro. Que me la encuentro luego en la pista y mira, no te digo yo que no le diga algo, pero así entre tanto fan agobiando pues me da cosilla, yo prefiero hacerlo en ambientes más exclusivos, para sentirnos más cómodos. Porque yo sé lo que es que la gente te salude y te reconozca en los lugares más insospechados. Aún así no perdimos la oportunidad de hacernos una foto que constatara que estábamos ahí, en primera fila.


Total que ella seguía ahí bailando y nosotros dándolo todo y luego cantó dos temas más: el Live Your Dreams (que fue un exitazo y la gente se volvió loquísima) y una inesperadísima (pero no por ella menos fantástica) versión del Vogue de Madonna que conseguí grabar en vídeo y que estoy subiendo a Youtube y que espero que no me censuren.

Y poca cosa más, poco antes de que acabara el show se situó ante nosotros EL HOMBRE MÁS GUAPO JAMÁS CREADO. 30 y tantos, guapo, bien peinado, con barba de dos días, algo canoso, de cuerpo perfecto, elegante y con una mirada que nos volvía locos. Evidentemente se dio cuenta (porque disimulados no somos, al menos yo) y su sexualidad provocó cierta polémica porque aunque le hacía fotos a las Titless Gogós el tío se sabía la letra del Sweet Dreams de Beyoncé y eso muy hetero como que no es.

En cualquier caso, al final el hombre desapareció, Soraya cerró el chiringuito y nosotros nos fuimos a nuestra puta casa.

Bueno yo no, yo me fui a casa de JB que está en Londres y como me ha dejado las llaves aproveché para dormir allí que me pilla más cerca del trabajo.

Lo del día siguiente mejor no lo cuento porque básicamente me tiré todo el día en cama por una indigestión, una bajada de tensión o de azúcar (a lo Esteban) y pensando que o me moría o perdía 15 kilos de golpe.

Al final ni lo uno ni lo otro.

Pero me quedaron claras dos cosas: la primera es que me lo pasé tremendamente bien y la segunda es que Soraya es de lo mejorcito que tenemos ahora mismo en este país. Tiene presencia, tiene carisma, tiene una voz de escándalo y además la tía sabe lo que quiere, lo hace bien y encima es un sol.

Así que ya sabéis, a comprar el Dreamer y ¡¡SANDENAAAAAAAIIII!!


ACTUALIZACIÓN:

Soraya acaba de ponerme un twit!


A little night music

Los de Apple, que parece que algún día dominarán el mundo y ya no se llamará Planeta DeAgostini Tierra sino Planeta Apple (no descarto que le peguen un bocao a algún hemisferio para formar el logo), han estado años y años peleándose con las discográficas para poder meter la discografía de los Beatles en iTunes.
Ayer anunciaron en su web que hoy sería un día que no íbamos a olvidar porque iTunes nos iba a dar una gran noticia. Y la noticia es que en pleno 2010 ya puedes comprar la discografía de los hippies estos desde tu ordenador.

Porque claro, en 2010 no hemos tenido oportunidad de comprar la discografía de los Beatles en setecientos formatos ya. A mí personalmente me la sudan (pero hasta un punto que no te puedes ni imaginar) pero imagino que al fan acérrimo le acaban de hacer una putada porque ahora también querrá tener los discos comprados digitalmente por si traen alguna chuminada más.

En Twitter he dicho que los Beatles apestan. Y es que a mí en general, salvo las 4 canciones que se sabe todo el mundo, me provocan un aburrimiento extremo. O eso o náuseas, que es algo que sólo consiguen algunos grupos de heavy, un par de cantantes de la copla más rancia y, sobretodo, casi todos los artistas españoles (sobretodo los que hacen música de cárcel -sí, Melendi, te miro a ti- y los que van de rockeros como Mago de Oz y demás).

En general desprecio a este tipo de artistas porque en lo personal desprecio a sus fans. Me dan muchísima pereza los tíos de treintaytantos con pelo grasiento, sudaderas de Metallica y entradas para el próximo concierto de... yo qué sé, Saratoga (si es que aún están vivos o fuera de una clínica de desintoxicación) en el vertedero municipal. Que así es más auténtico.

Y ahora no me vengáis con lo de "¡que sean rockeros no implica que se droguen!" porque si os contara la cantidad de polvo blanco que la pobre Leo (la señora de la limpieza) tuvo que inhalar en plan pasivo en los baños de la Fnac cuando los de Mago de Oz vinieron a firmar discos seguro que os da la envidia.

Pues el caso es que la gente se me revoluciona porque justo después de decir que los Beatles apestan he dicho que S.O.S. de Take That (de su nuevo disco "Progress") me parece un temazo. Lo que no han leído es que, aunque la canción en concreto me parece fantástica y el disco la mar de chulo, ni soy fan de Take That ni nunca lo he sido y que además algunas de sus voces me parecen harto ridículas. Claro que como nunca escuché ningún disco suyo entero (Dios me libre) no sé si ya cantaban como señoras mayores antes y por eso tenían tantas fans ansiosas por encontrar una figura materna en Robbie & Co.

También me han dicho que cómo puedo decir eso y luego decir que me gusta Soraya. Pues mira, porque con Soraya no me duermo. Por eso y porque una canción de Soraya me dice más que la peor canción del Sargent Pepper Fried Chicken ese que tan famosérrimo es.
Además que la mitad de los que mantienen esa pose ni se saben las canciones de los Beatles, ni tienen sus discos originales, ni conocen una mierda de su historia. Pero queda guay y cool y culto decir que los Beatles son históricos y son lo más, despreciando el petardeo pop que es en realidado lo que hace que se vuelvan locos y corran como locos a comprar discos, entradas y merchandising.
Es un poco como la paradoja de la moderna de camiseta rota y Wayfarers que escucha Paola & Chiara porque es "súper trash" pero no tienen ni puta idea de quién son, ni de qué música hacen... a lo mejor ni de que son italianas. Pero se las pones en el PopBar de Razz y "buuuh tia, qué subidón, espera que saco la Reflex que pesa más que mi cerebro y hago unas fotos súper cools para mi Flickr".

A mí es que el rollo de "grupo histórico" me la trae bastante al pairo. A mí la historia de la música me importa CERO. A mí lo que me importa es tener música en mi iTunes (buena o mala) que signifique algo para mí. Y lo único que tengo de los Beatles en mi biblioteca es la banda sonora de "Across the universe", película maravillosa (lo único bueno que han hecho los Beatles) a la que le sobran como 45 minutos. Así que imagínate el cariño que le tengo yo a los tíos estos.

De todas formas, como decía, a mí el rollo de grupo que lo cambió todo y súper histórico (y por ende super respetado) me da hasta grima, fíjate. Porque al final seguro que Taylor Swift acaba vendiendo también millonadas de discos, pero la gente la conoce por ser la tonta a la que Kanye le jodió la entrega de los MTV Video Awards.

Y ya que estoy os diré que el disco de Take That es la mar de chulo. Que, como decía un amigo por Facebook, suena a todo menos a ellos; y es que se nota muchísimo la mano de Stuart Price por detrás. No ha llegado a hacer un Confessions 3 (recordemos que el 2 es "System" de Seal) y se ha quedado más cercano a un Day & Age de The Killers pero sin Brandon, lo que le resta como el 70% de la gracia.
Pero en general no sólo no suena mal sino que, lo más importante, no aburre. Aunque el single "The Flood" me parece la típica canción para fans mojabragas, el resto va bastante por otros derroteros y salvo un par de mid-tempos la mar de frescos y bien producidos no hay concesiones a las baladas ni a la complacencia. Temas como "SOS" o "Kidz" son dos hostias en la cara, enérgicas y con estribillos que enganchan y animan a lanzarse a bailar cerveza en mano. "Happy Now" parece robado directamente al repertorio de Zoot Woman y otros como "Underground Machine" o "Affirmation" se acercan mucho a esa sensación. Es como si Gary Barlow, Robbie y los otros que ni me acuerdo (ni me acordaré) hubieran ido por ahí robando temas a otros grupos.

Pero en general es un disco coherente, con presencia y que, como ya digo, no sólo no pasa desapercibido sino que además sorprende y, sobretodo, no da ganas de editarlo en iTunes y quitar las típicas cinco canciones que sobran.

De los Beatles al final no quitas cinco canciones: quitas cinco discos enteros. Que mucho "Hey Jude" y mucho "All you need is love" pero te pones el Rock Band Beatles y siempre acabas tocando tres canciones y el resto es un WTF constante.

He dicho.

P.D.: Añadamos una cosa más a la lista de cosas buenas que han hecho o han surgido de los Beatles:

El ataque de los clones

GRACIAS YOKO
(si no fuera por ti lo de ser hippie, llevar barba, no ducharse y tomar LSD para ir a los museos estaría bien visto).

Espera, lo último lo haces y nos gusta.

¡BRAVO!




(El más listo en todo esto fue Michael Jackson, que compró las canciones de los Beatles y la lió parda -tras forrarse como una perra-)

Missing

Mira que a mí me gustaría escribir mucho más por aquí para hacer reviews y esas cosas. De hecho el otro día iba escuchando lo nuevo de Robyn pensando "tengo que hacer una review" pero es que llego tan cansado a casa que con suerte aguanto para ver una serie o una peli y quedarme frito. Y de lo de Rihanna también.

Pero la haré, como hacen los grandes: con dos o tres semanas de retraso.

Lo cierto es que no tengo mucho que contar. Ya se está gestando la Caravana de Mujeres (Cobraestilo (C)) para visitar Barcelona en el puente de la no-sé-qué en Diciembre. Y es que claro, el día 7 hay concierto de Lady Gaga y todas las maricas de España que fueron engañadas haciéndoles creer que no habría concierto en Madrid vienen como locas (y nunca mejor dicho) a invadir la ciudad condal.

Mi plan a estas alturas era estar cachas y guapo, porque esto va a ser peor que el Circuit, pero mira: no. Osea, guapo estoy. Cachas no. Pero bueno, la vida sigue.

Ayer en el trabajo ya dejé caer que si el día 7 (que se trabaja) no puedo cogerme fiesta, me pondré enfermo. Y es que, como comprenderás, tengo una entrada de pista y aunque soy consciente de que Tidusin va a estar ahí haciendo cola desde unos tres meses antes (creo que ya está preparando la mochila para acampar a las puertas del ¿Sant Jordi? ¿El Estadi? ¿Dónde coño es el concierto?
Bueno, da igual, aunque sé que él va a guardar sitio no quiero que me pase un Abuga en el Sticky & Sweet, llegar justo cuando ya estamos los demás en el mogollón de entrada y no poder colarse y quedarse atrás.
Así que avisados están: yo ese martes no trabajo. ¡Anda que no!

Además con tanta gente que viene del resto de España no sé cómo lo voy a hacer para cumplir el calendario social con todos y cada uno de ellos, que aunque se conocen Barcelona como si la hubieran parido ¡hay que hacer de anfitrión! Lo que significa que me tocará fregar los platos porque seguro que hay visita a este casa del demonio que tenemos por morada.

Estas dos próximas semanas voy a estar un poco tristón porque JB se me va a Londres a formar a los abanderados del sector téxtil de Saint Paul Cathedral. Es una mezcla de tristeza por que se va y tristeza por no ser yo el que se va dos semanas a Londres. Con las ganas que tengo yo de ir por Regent Street y cruzarme con Cheryl Cole y gritarle lo de "Alouette ette ette!!".
Ayer yo había preparado una despedida súper guay que consistía en hacerle la cena, ver una peli y quedarnos fritos pero el pobre estaba tan cansado que al final la despedida fue un cigarro en la zona de botellón de delante de su casa y un abrazo.
Eso sí, enfadado estoy porque no ha sido capaz de esperarse dos putos días para ver una peli conmigo. ¡Vergüensa de tus hijo!

En fin, que así están las cosas: estoy contento. Y también estoy cansado. Y no sé qué estoy más, si contento o cansado. Pero you and me together, stars 4-ever.

Ah, el otro día vi "Origen" y no entiendo por qué la gente necesita una línea temporal para entenderla si me pareció la cosa más sencilla del mundo. Aunque con los subtítulos panchitos que me encontré la cosa era un poco absurda. No llegaron al punto de aquel subtítulo de Mad Men en que Don Draper decía "NO" y en el subtítulo ponía "SÍ", pero casi.

Ah, y no os lo he dicho!!! Ya podéis acceder al blog desde www.estoybailando.es y desde www.estoybailando.com. En breve haré algún retoque para hacer una web como Dios manda, pero puede que eso ocurra hacia el 2017 (que será cuando intuyo que tendré tiempo para tonterías).

Ahora tengo que encontrar tiempo para mezclar esto:


Coming soon

New and improved

Soy un hombre de contrastes. Hace unos días explicaba a unos amigos que estoy empalagosamente feliz. Porque cuando soy feliz siento la necesidad de que todo el mundo sepa, no que soy feliz (que es algo que no soporto), sino lo mucho que me importan o les quiero. Y eso me convierte en una especie de Oso Amoroso que cuando se toma dos cubatas de más provoca momentos más próximos a Sorpresa, Sorpresa que a SatC; con gente emocionada dando las gracias y prometiendo no llorar.

Lo malo es que hoy, que actualizo el blog por primera vez en casi dos semanas, no me siento extraordinariamente feliz.

Me explico.

Como muchos de vosotros ya sabéis (porque me seguís por Twitter, Facebook, Gayromeo, Bear, Manhunt, Foursquare, Linkedlingling & more) hace un par de semanas empecé a trabajar en un sitio nuevo.

Un sitio nuevo y maravilloso... Bueno, no nos pasemos. La verdad es que estoy muy contento (contentísimo, de hecho) pero no nos vamos a revolucionar como Barcelona con la visita Papal -aunque yo, que trabajo y vivo lejos de ese horror de arquitectura churrística que es la Sagrada Familia, no he notado nada raro- porque aunque sí que es cierto que es un buen trabajo no es la panacea. Vamos, que mis 40 horas a la semana, por muy bien repartidas que estén, no me las quita nadie.

Pero no me queda tiempo para casi nada. Cuando llego a casa por la noche estoy tan cansado que lo único que consigo hacer es la cena, escuchar algo de música y, si me da por ahí, una paja y quedarme frito.

Y un cigarro antes de dormir.

Porque ahora me ha dado por fumar. Soy consciente de que tiene infinitamente más inconvenientes que beneficios, que fumar provoca cáncer y que además te deja un olor espantoso. Pero te da una clase y un estilo que no te ofrece nada más. Y tampoco es que esté en plan Beatriz Carvajal por los pasillos del instituto de Compañeros.

Como os decía: llego a casa cansado y al día siguiente paso tantas horas en el trabajo que ni bloggeo, ni escribo, ni remezclo ni nada de nada. Ni siquiera socializo con mis compañeros de piso.

Sí, porque ahora somos más en casa. Creo que ya os conté que Tidusin y LleonardPler se han venido a vivir con Daddy-Oh! y conmigo; y es que seguramente en un tiempo Daddy-Oh! se acabe yendo y así tengo con quién seguir compartiendo piso hasta que pueda conseguir mi próxima meta: vivir solo.
No creo que mi sueldo dé para mucho, pero si lo consigo seré el hombre más feliz del mundo.

Trabajo, tabaco y compañeros de piso. Todo nuevo.

Y soy consciente de que estáis esperando que os haga una descripción detallada de todos mis compañeros de trabajo y de si hay material para esas historias extrañas que me ocurren a mí y que os gusta que explique por aquí, pero mira... no. Lo único que me ha pasado estos días y que es digno de blog fue mi salida del armario. Teniendo en cuenta que durante la primera semana estuve casi todas las horas encerrado en un aula recibiendo formaciones y sin cruzar palabra con alguien que no fuera la chica que entró a trabajar conmigo, tiene mucho mérito que a semana y media ya haya dicho a todos que soy marica.
Y todo porque me harté. Me harté de que todo el mundo me comentara lo buenas que estaban las chicas que pasaban por ahí. Estuve a punto de soltarlo en esa conversación, justo entre teta y teta, pero alguien habló de otra teta y perdí mi oportunidad.
Pero Dios, que es sabio, me lo puso a huevo. Sonaba en el hilo musical el "Live to tell" de Madonna y un compañero veterano me dijo: "Hostia... esta canción es de mi época... a ti te debió pillar muy joven, a lo mejor no la conoces..." y yo le miré fijamente y le dije: "Es Madonna. Y yo soy un poco gay. Así que sí, la conozco. Las conozco todas." Él me miró y dijo: "Ah... vale... claro, para vosotros es como una Diosa".

Y punto.

Lo realmente divertido es que mis jefazos saben perfectamente de qué pie cojeo porque yo lo tengo puesto en mi currículum. Y no, no es que haya puesto "Orientación sexual: homosexual" entre el domicilio y el estado civil; pero como trabajé en TopHunted haciendo listas para el canal de música y el canal gay y nunca se sabe por dónde pueden salir las cosas, pensé que lo más guay era ponerlo y quedarme más ancho que largo.

Pero bueno, que yo no iba a hablar de esto. Os decía que hoy, que escribo (por fin!) en el blog no me siento extraordinariamente feliz. Y sé que lo soy, porque tengo motivos. Tengo un buen trabajo, tengo buenos amigos y tengo algunas personas que cada día me hacen sentir como que soy lo puto más. Pero aún así hoy me siento agotado, sin ganas de nada y algo tristón.

Le dije el otro día a JB que me alegraba mucho de haberle conocido porque es un tipo de amigo que llevaba mucho tiempo queriendo encontrar. Al menos en Barcelona. Porque luego me di cuenta de que la amistad que tengo con él, ese rollo BFF que me hace sentir tan jodidamente bien, la tengo también -aunque por fascículos- con mi gente de Madrid. Con los que ya estaban allí y con los que hace poco que se han instalado y no paran de decirme que el próximo he de ser yo.

Ojo, que no es que no me gusten los amigos que tengo aquí, que los adoro a todos y cada uno de ellos. Es algo difícil de explicar, pero la conexión que he establecido con él y que tengo con muchos madrileños (de pura cepa o, la mayoría, de adopción) no es algo fácil de encontrar.

Así que me paro a pensar y veo que cumplido el objetivo primordial que tenía hace unos meses que era el de encontrar trabajo (y, repito, he tenido una suerte descomunal con el que he conseguido) ahora no sé qué hacer. Y supongo que hasta que no me acostumbre a este ritmo y encuentre huecos suficientes para hacer lo que me gusta y me apetece (beber, fumar, follar, escuchar música, mezclar y escribir) me sentiré así.

Por suerte hasta que consiga ese equilibrio, tengo a los JB's. El de aquí, los de aquí y los de allí. Y cuando digo allí no digo sólo Madrid ¿eh?

Dadme unos días para que me acostumbre, me recupere, descanse, deje de dolerme la espalda a todas horas. Pasadme una botella de Vodka y preparaos porque estoy seguro de que después de la mierda de época que he pasado, lo que viene va a ser FABULOSO.