Living a Sandenai

El jueves pasado la grandísima Soraya presentaba su último discazo, Dreamer, en la sala Sutton de Barcelona.

Para allá que fuimos Danny Oton, IlSignorino, el otro chico que era muy guapo y cuyo nombre no recuerdo y yo. Antes de entrar hubo un momento gabinete de crisis porque no sabíamos sin con las pintas que llevábamos nos iban a dejar entrar; que no es que fuéramos en plan rocieras con las faldas de topos y las chanclas pero a mí mis bambas no me las quita nadie que estuve todo el puto día de pie y los zapatos me matan.

En la puerta no nos pusieron mucha pega (aunque el segurata nos miró bastante raro y soltó algún comentario sobre la camiseta que llevaba IlSignorino bajo el jersey) y como estábamos en lista no pagamos una mierda. Como tiene que ser. Si vas a pagar al menos que sea porque les hace falta, como en Arena (que necesitan urgentemente una reforma) y no a unos pijos relamíos que tienen el local lleno de publicidad de Moët.

La Sutton, que yo no había ido nunca, es una discoteca bastante grande con unas zonas vips casi más grandes que la pista principal que al final de Vip no tienen nada porque acaban abarrotadísimas y llenas de guiris y oficinistas borrachos que parece que estén en la boda de su prima. Bueno, en realidad lo de la boda de tu prima es en la sala de fumadores. El horror hecho música. Se nota que es un local hetero porque aquello además de estar lleno de gente fea (toma heterofobia!) era el infierno hecho playlist: Duncan Dhul, Seguridad Social, Safri Duo y cosas de estas que sólo aguantas con una corbata en la cabeza y una barra libre bien surtida.

Hablando de barra. 12 euros el cubata de vodka con naranja, 6 euros la naranjada y 9 la Coca Cola. Eso sí, camareros estiradísimos (como todos en general).

Tras comprobar la fauna y flora del lugar nos colocamos prudentemente cerca del escenario (en primera fila, vamos) porque los fans que había pululando por el local estaban pasándoselo genial por otros lares y el resto (que o eran guiris o eran heteros de estos que no tienen ningún tipo de vergüenza pero provocan la ajena) no tenían ni idea de que actuaba Soraya.

Antes de la actuación estuvo pinchando el DJ Pectorales, que es de estos que saben elegir la música y que de vez en cuando hacen un efecto guay con su tabla de mezclas pero que al final abusan de la pose de DJ y acaban tocando los botones para simular que hacen algo cuando en realidad todo viene hecho ya por el mix que estás mezclando.

El telón del escenario se cierra y al poco rato se abre para dejar paso a Soraya, a las Titless Gogós y a Brian Cross (que resultó ser un tío con una camiseta con una mariposa gigante que llevaba toda la noche dando vueltas por ahí).

Y qué mejor carta de presentación que "You've got the music". Como nos pusimos justo al principio de la pasarela (yo siempre hago eso en los conciertos de las más grandes, ya lo hice con Madonna en el Sticky & Sweet) cada vez que la chica salía a cantar le veíamos la espalda.


Pero luego, entre canción y canción, Brian Cross se ponía a pinchar (y el chico iba a lo seguro, porque pinchó la mitad del One Love de David Guetta y hitazos que no fallan como el Sweet Dreams y tal) y Soraya se situaba junto a él a darlo todo con su copa de cava.
Bueno, sería Moët así que deberíamos llamarlo "CHAMPÁN". Pero a mí "champán" es una palabra que siempre me ha hecho gracia porque suena a final de refrán de abuela nonagenaria. "Van dos en moto y se cae el de enmedio por la ventanilla. Champán!".


Así que la presentación fue animadísima porque entre temazo y temazo el Sr. Cross se lanzaba y metía un tema de Soraya y la cosa no sólo funcionaba de puta madre sino que le daba un empaque perfecto al disco (porque no hay mejor forma de presentar temas nuevos que mostrar con qué pega a la perfección). Y claro, el segundo tema no podía ser otro que "Dreamer" y ya sabéis cómo empieza Dreamer.
Para cuando quisimos darnos cuenta ya teníamos a Soraya a nuestro lado y pudimos gritar como locas aquello de:

#SANDENAI!!!

Y creo que le dimos un susto.

Ella lo dio todo en el escenario, el público reaccionó la mar de bien y nosotros disfrutábamos como niñatas en un concierto de TakeThat. SORAYA TE QUIEROOOOOOOO

Los que sí estaban como fans de Take That eran los fans que se acercaban al escenario tras cada actuación y le lanzaban besos y le pedían que se acercara a hacerse una foto y la amenazaban con un "O VIENES TÚ O VOY YO ¿EH?!" Ella, que es toda una diva y además es simpatiquísima, se acercó a hacerse fotos con todo el que quiso.
He de reconocer que estuve tentado de llamarla y decirle "tía, que soy Hidroboy!!! El amigo de Tony Tornado!! Y del Stalker Australiano!! ¡¡EL DEL SANDENAI!!" pero también es cierto que a mí en actos así me da mucho apuro. Que me la encuentro luego en la pista y mira, no te digo yo que no le diga algo, pero así entre tanto fan agobiando pues me da cosilla, yo prefiero hacerlo en ambientes más exclusivos, para sentirnos más cómodos. Porque yo sé lo que es que la gente te salude y te reconozca en los lugares más insospechados. Aún así no perdimos la oportunidad de hacernos una foto que constatara que estábamos ahí, en primera fila.


Total que ella seguía ahí bailando y nosotros dándolo todo y luego cantó dos temas más: el Live Your Dreams (que fue un exitazo y la gente se volvió loquísima) y una inesperadísima (pero no por ella menos fantástica) versión del Vogue de Madonna que conseguí grabar en vídeo y que estoy subiendo a Youtube y que espero que no me censuren.

Y poca cosa más, poco antes de que acabara el show se situó ante nosotros EL HOMBRE MÁS GUAPO JAMÁS CREADO. 30 y tantos, guapo, bien peinado, con barba de dos días, algo canoso, de cuerpo perfecto, elegante y con una mirada que nos volvía locos. Evidentemente se dio cuenta (porque disimulados no somos, al menos yo) y su sexualidad provocó cierta polémica porque aunque le hacía fotos a las Titless Gogós el tío se sabía la letra del Sweet Dreams de Beyoncé y eso muy hetero como que no es.

En cualquier caso, al final el hombre desapareció, Soraya cerró el chiringuito y nosotros nos fuimos a nuestra puta casa.

Bueno yo no, yo me fui a casa de JB que está en Londres y como me ha dejado las llaves aproveché para dormir allí que me pilla más cerca del trabajo.

Lo del día siguiente mejor no lo cuento porque básicamente me tiré todo el día en cama por una indigestión, una bajada de tensión o de azúcar (a lo Esteban) y pensando que o me moría o perdía 15 kilos de golpe.

Al final ni lo uno ni lo otro.

Pero me quedaron claras dos cosas: la primera es que me lo pasé tremendamente bien y la segunda es que Soraya es de lo mejorcito que tenemos ahora mismo en este país. Tiene presencia, tiene carisma, tiene una voz de escándalo y además la tía sabe lo que quiere, lo hace bien y encima es un sol.

Así que ya sabéis, a comprar el Dreamer y ¡¡SANDENAAAAAAAIIII!!


ACTUALIZACIÓN:

Soraya acaba de ponerme un twit!


2 comentarios:

AO dijo...

Sandenaiiiiii!!!!

Arriba Soraya, me encanta!

En Madrid también iba a dar un concierto de presentación, pero al final lo suspendió, no sé por qué. Estoy deseando verla de nuevo en concierto. La última vez que la vi fue en el Orgullo de Sevilla, pero en aquella época aún no había salido Dreamer.

Me gusta mucho tu blog Hidroboy, y te sigo a menudo.

Un abrazo!

Alex Pler dijo...

¿9€ la Coca-Cola? ¿En vez de hielo le echan polvo de oro o qué?

Muy fuerte el Twit...

Y un respeto a Safri Duo (que además en Arena me los pusieron no hace mucho) jajajaja.