Envuelto para regalo 2

A ver.

Ante la avalancha de quejas y protestas (algunas han llegado hasta de la Conferencia Episcopal) por mi anterior post os lo voy a explicar porque fruto de la ira y la inconsciencia parece que el mensaje no quedó claro.

A mí el valor monetario de un regalo me da bastante igual. Hoy mismo en el trabajo nos hemos dado el amigo invisible, que ya ves tú qué valor puede tener eso, y oye, que me emocionado porque la persona que me lo ha hecho a mí ha ido a un sitio específico a buscar algo y acertó de pleno.

Incluso lo de mi madre, que me regaló un pijama, me hizo ilusión. Porque me hacía falta y porque se desplazó a comprarlo y no cogió y me dio 30 euros y me dijo que me apañara.

Lo que me jode es que yo me he pasado 3 días dando vueltas, entre turnos de comida y horas extra, p'arriba y p'abajo, llamando aquí y allá buscando el regalo perfecto para cada uno, pensando en lo que le puede gustar y en qué dijo aquel día mientras miraba no sé qué en mi casa y le gustó.

Y mis regalos se han basado, únicamente, en preguntar: "¿Qué quieres?" y comprar lo primero que han visto.

Y sí, me jode haberme gastado yo más. Porque el valor monetario no importa, pero implica un esfuerzo. Implica que yo dejo de comprarme una cosa u otra por darle una alegría a una persona, y esa persona ni siquiera me trae un detalle. Vamos, que yo este mes tenía un montón de cosas que pagar y un montón de chorradas que comprarme y las he dejado a un lado por poder comprar esos regalos.

¿Pa' qué? Pa ná!

Así que sí: me molesta haberme gastado X euros en regalos para mi familia y que mi familia haya hecho un esfuerzo tan pobre (y no sólo económico) por darme una alegría a mí.

4 comentarios:

waukin dijo...

A mi me dieron un sobre con 50 € y me dijeron que tras varias semanas de comidas de tarro y paseos por el centro, han desistido y han optado por darme el dinero. Y todo esto porque deben estar hartos de que arquee la ceja al desenvolver el pijama, los calcetines, boxers, bolígrafos, etc... de turno.

Yo por mi parte no he regalado nada. Por primera vez. Y avisé con tiempo. Me he hartado hacer regalos porque lo digan los comerciantes. Lo haré cuando me apetezca, cuando vea lo que me apetece regalar y en el momento que me parezca que hará más ilusión.

En cambio mis amigos me han regalado cosas (y eso si que ha sido una sorpresa).

En resumen, que lo de las pelas no mola nada, lo del pijama tampoco, y lo de que te esfuerces, te pongan cara de "solo me alegro de que no me hayas regalado algo peor", y que encima tus regalos sean peores, después de lo que te has esforzado...

En fín, que así estaba yo el año pasado. Ánimo.

Peter Browning dijo...

Totalmente de acuerdo Hidroboy, es una putada el patearte todos los sitios buscando el regalo perfecto o que mas ilusión le puede hacer a alguien y que luego la otra persona te regale lo primero que se le ocurra.
Yo no soy mucho de regalar y este año solo he regalado a mi madre y a mi mejor amigo. Mi madre me ha regalado un albornoz que lo necesitaba y yo le he regalado un perfume, el de Christina Aguilera que no se vende en España y lo pillé en ebay. Y mi amigo como los dos somos muy cinéfilos pues nos hemos regalado una peli, eso si yo se la he regalado en dvd y el me la ha regalado en blu-ray,

ALG dijo...

Que sí Hidro que tienes razón.

Yo la verdad es que soy de los que ha desistido, les digo exactamente lo que quiero, e incluso muchas veces me lo compro paso la lista y eligen lo que me quieren regalar.

Al contrario hago casi lo mismo, pido exactamente que me digan lo que quieren, excepto con mi madrina, que la pobre es un caso perdido y me la llevo al corte en rebajas para dejar que me sablee la tarjeta en lo que quiere, para que aún así no se quede contenta y vuelva posteriormente a cambiarlo XD

Y claro si veo algo chulo para cada uno pos lo compro, este año han sido unas tazas personalizadas con el nombre y dibujitos hechos en platino para los colegas intimos.

Pos eso

Sísifo de Éfira dijo...

Entendido. Y hasta estoy de acuerdo contigo. Pero insisto en que esas cosas no se miden en dineros.
Es cierto que los regalos son algo muy elocuente.