Finalmente se unió a ellos el viernes a altas horas de la noche en el Bharma, el bar dedicado a la serie LOST y decorado como si estuvieras en plena Isla
Allí Hidroboy conoció a varios amigos de NoChu cuyos nombres no recuerda, pero es normal.
Una vez tomadas las primeras cervezas y hechos todos los comentarios pertinentes sobre Lost y sobre el bodorrio de la siguiente semana, el grupo se dirigió al centro para tomar algo en otro lugar.
El sitio elegido fue La Penúltima. Y tras atravesar hordas ingente de adolescentes con ganas de emborracharse en el metro, llegaron a su destino y se introdujeron como pudieron entre la multitud que poblaba el local.
Pasado un rato pudieron disfrutar de un poco de relax y de espacio (y de oxígeno) cuando la gente empezó a largarse a las discotecas (incluído un ex-rollo de Hidroboy que desencadenó el eterno debate "¿y tú qué haces cuando te lías con uno que no te gusta y te lo encuentras siempre, maricón?"). Tras varios vermuts y muchas risas (incluído el momento reset a NoChu y sus interminables "Y DICE, Y DICE, Y DICE... Y YO LE DIGO!") Hidroboy tuvo que acudir al baño y se sorprendió al encontrar todo decorado con fotos de hombres propias de revista de Paco y Manolo.
Así que pensó "¿Te imaginas que me encuentro a Tony Tornado en esta pared?" y fue en el momento en que sacó su miembro viril del pantalón para miccionar que frente a él apareció LA FOTO. Allí estaba, Tony T, decorando la pared del baño de La Penúltima rodeado de chulazos como él. Hidroboy miccionó como pudo, presa de la emoción y la alegría y le hizo una foto.
Foto que luego repitieron Chico Tóxico y Nochu (y seguramente muchos anónimos más que no nos interesan). Intentaron por todos los medios subir la foto a internet pero entre que uno usa un iPhone, el otro no cargó el Nokia y el peor de todos no pagó la factura y no podía usar el 3G.
También se comenta que en una esquina de La Penúltima estaba Eloy. El de compañeros. El hijo de la Carvajal, que en su época de borracha siempre decía "ELOOOOOOY!". De hecho ese "ELOOOOY!" es el grito de guerra de Hidroboy siempre que va boracho, pone voz de cazallera y grita "ELOOOOOOY!!!"
Nicolás Belmonte, que se llama el muchacho. Se le oyó hablar de castings y no sé qué más, pero lo que de verdad interesaba al grupo de Hidroboy, ChicoTox, NoChu & co. era acercarse y preguntarle: "¿ERES ELOY?" (A lo que uno de los amigos de NoChu respondió "No, soy el mañana" y hala, ya tienes a cuatro maricas borrachas riéndose a carcajada durante diez minutos).
Una vez los echaron de La Penúltima, el grupo (menos uno -osea, el cuarteto) se fue a la Metro y aunque tenían entradas VIP ¡tuvieron que hacer cola! Indignante.
La Metro estaba llena no, lo siguiente. Y aunque había mucha cara conocida Hidroboy no saludó a nadie porque él no saluda, a él le saludan!
Inexplicablemente la música estuvo muy bien (que te pongan el Guetta's Remix de Revolver, el Rain de Calvin Harris y el OhLaLaLa de 2Eivissa pues te alegra la noche).
Pero como Hidroboy había madrugado mucho ese día para ir al dentista (porque se va a poner brackets) y cortarse el pelo y había dormido muy poco, el cansancio hizo presa en él y estaba que se moría así que se retiró justo cuando un tío un poco pesado que se lanzó a por NoChu acabó ligando con Chico Tóxico).
Momento estelar cuando el recogevasos les pidió que se apartaran (y NoChu e Hidroboy imaginaron que para alcanzar unos cubatas que había por ahí) y se quitó la camiseta ante ellos, provocando que Hidroboy le aplaudiera y no le apartara la mirada durante toda la noche porque aunque el chico era pequeñín tenía su aquél, oye.
Finalmente Hidroboy se retiró y se marchó a su casa con unas ganas de caer en la cama que no se pueden narrar.
Al día siguiente sufrió el drama de no encontrar la cartera. Las lágrimas provocadas por el pánico casi se apoderan de él. Recordó que su compañero de piso había puesto el pantalón de la noche anterior a lavar y corrió a comprobar si en el tejano tendido había restos de su cartera Tommy Hilfiger pero no. Pausó la lavadora que había puesta en ese momento y extrajo toda la ropa empapada para comprobar que la cartera tampoco estaba ahí.
Aterrado ante la posibilidad de tener que tramitar un nuevo DNI se rindió y al bajar la mirada la vio, tirada en el suelo del balcón junto a los tejanos tendido. Finalmente sí había pasado por la lavadora y al tenderla, el compañero de piso de Hidroboy la había lanzado sin darse cuenta contra una pared.
Menos mal que no la tiró por encima de la barandilla.
Que Hidroboy por su DNI MA-TA.
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